Son placas de hormigón reforzadas con hierro, encastradas en postes, que poseen una cara símil ladrillo visto y una contracara lisa, con una placa superior con formato sardine sobresaliente dándole una terminación de calidad. Este cerramiento de 2 metros de altura es ideal para medianeras, teniendo como cualidades el rápido montaje y máxima seguridad.